Teatrillos para títeres de dedo-Carmen Domech
Un espacio escénico para los títeres de dedo.
¿Quién no se ha pintado dos ojos y una boca en la yema de un dedo y ha jugado a que era un personaje ajeno a su cuerpo?
Los títeres de dedo son uno de los juguetes preferidos de los más pequeños. Su sencillez, forma y tamaño hacen que sean muy fáciles de manipular y puedan tener un montón de personajes en sus manos.
Con un universo en sus dedos, mezclan las historias más fantásticas en su mundo cotidiano.
La cocina se puede convertir en el laboratorio del científico Quelisto o donde la bruja MalvaRosa hace sus pócimas y hechizos. El baño, en la nave espacial de la intrépida Estelalejos, y así toda la casa.
Esto es maravilloso, les ayuda a conocer su mundo, y asimismo fomenta la imaginación, el lenguaje, la comunicación, la creatividad y muchas cosas más. Todo de una manera divertida, vivencial y placentera.
Pero también es importante desarrollar una historia en un espacio escénico preparado para tal fin.
Diálogos, entradas y salidas de personajes, el posible attrezzo necesario enmarcándolo en un teatrillo. Una caja mágica donde fabricar historias, aunque siempre puedan salir los personajes para aventurarse por los alrededores.
La propuesta de esta exposición es animar a los pequeños a crear su propio teatrillo (con la ayuda de sus mayores, si la precisan).
Casi todos los títeres que veis están comprados en distintos lugares. Pero los teatrillos están hechos a partir de cosas que tenía en casa: cajas de zapatos, archivadores viejos, sillas rotas, botes de diferentes productos, etc. que, con pinturas, telas y todo tipo de cosas para su decoración, se transformaron en retablos para tener el maravilloso mundo del teatro al alcance de la mano.
¡Animaos a construir vuestro propio teatrillo y a disfrutar con los títeres!
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